A partir del 21 de diciembre ya estamos oficialmente en la época más fría del año. Esto es así, nos guste o no. Y es que hay a quien el invierno le paraliza. A nosotros no. Por eso, en RideOn te mostramos los mejores planes para darlo todo en invierno en la ciudad de las Fallas. Disfrútalos.
#1 Paella valenciana sí o sí
Afortunadamente degustar la paella más famosa del mundo no depende de la climatología. No lo dudes, alquila tu moto y acércate a la playa de la ciudad. Ya verás, no solo disfrutarás de una gastronomía con mucho nombre (y bien merecido), también es la mejor excusa para disfrutar del mar en invierno. Qué gran privilegio. Busca y encuentra tu mejor elección, porque hay una amplia oferta de restaurantes donde poder comer la mejor paella valenciana. No fallarás.
#2 Ciudad de las Artes y las Ciencias (CAC)
Este conjunto arquitectónico, obra de Santiago Calatrava, se ha convertido en uno de los mayores complejos de divulgación científica y cultural de Europa. Y, por lo tanto, en uno de los emblemas de Valencia. Y encima resulta un planazo en invierno, cuando las bajas temperaturas aprietan. En RideOn te aconsejamos la visita a l’Oceanogràfic para descubrir los secretos de la vida marina, puesto que es el acuario de más envergadura de nuestro continente. Increíble. Tampoco te pierdas l’Hemisfèric, donde se proyectan películas IMAX (3D) en una pantalla semiesférica, el Umbracle (mirador ajardinado), el Museu de les Ciències (innovador centro de ciencia interactiva) o el Palau de les Arts Reina Sofía, dedicado la programación operística, entre otras atracciones turísticas.
#3 Museos para todos los gustos
¿Invierno lluvioso? Que no cunda el pánico, porque Valencia tiene una oferta museística que quita el hipo. Piérdete en sus más de 30 museos, en función de la temática que más te llame la atención. Los más destacados y con más renombre son los siguientes: IVAM (centrado en el arte contemporáneo), el Museo de Bellas Artes San Pío V (con tesoros de Sorolla o Goya), el Museo Fallero (donde aprender sobre la celebración más arraigada de la ciudad, las Fallas) o el Museo Nacional de Cerámica. También hay espacios culturales muy curiosos, dependiendo de tus preferencias, pero te recomendamos que te pierdas por el Museo Casa Semana Santa Marinera, el Museo de la Seda, el Museo Arqueológico de la Almoina, la Fundación Bancaja o el Museo de los Soldaditos de Plomo.
#4 Visitar el centro
Sea invierno o no, no puedes irte de Valencia sin visitar su centro histórico. Es decir, no te pierdas la Catedral de Valencia, con su eclecticismo arquitectónico que muestra la propia evolución del lugar, así como la Basílica de la Virgen de los Desamparados, otro edificio religioso que te dejará con la boca abierta. Y, evidentemente, paséate por las calles del casco antiguo sin rumbo alguno. No olvides que los jueves (siempre que no sea festivo) tiene lugar el Tribunal de las Aguas (a las 12:00h en la puerta de la Catedral), declarado por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Se trata de una estructura legislativa nacida para impartir justicia, patente de la época de Jaime I. Está formado por 8 miembros quienes resuelven los problemas que se plantean en una ceremonia abierta al público. Una curiosidad más de la ciudad que vale mucho la pena conocer.
#5 El barrio del Carmen
Aunque se encuentra en el extremo noroeste del casco histórico, el barrio del Carmen merece una mención aparte, ya que es el más conocido de cuantos posee Valencia. ¿El motivo? Porque tiene fama de edén gastronómico y presume de un ocio mediterráneo sin igual. Tal es así que su oferta de restauración es inabarcable. Y, además, se encuentra inmersa en un área arquitectónica con más de mil años de historia y con espléndidos ejemplos de patrimonio medieval, fuente de centenares de leyendas. Porque el barrio del Carmen es una de las joyas de Valencia, la combinación perfecta de historia y ocio. No te lo pierdas, llueva o nieve. Prométenoslo.