Puerto de Menorca y Mercadal
Por la zona del puerto Pesquero de Menorca las edificaciones ya nada tienen que ver con las construcciones influidas por la tradición inglesa. Aunque dentro de ellas se levanta otra de las tradiciones arreladas a la cultura menorquina fruto del paso de los ingleses por la isla, la destilería de Gin, Ginebra o pomada como la llaman las gentes de Ciutadella. Con cuatro alambiques, alcohol vinícola del Penedès y las esencias de la Ginesta se prepara esta rica bebida reina de las populares fiestas.. Desde Rideonmotorent animamos a visitar Menorca con el alquiler moto menorca.
Dentro de la iglesia de Santa María existe un órgano de 3.200 tubos que en sus orígenes no debía ser destinado a mahón pero la mala suerte de una tormenta lo desvió hasta allí. Actualmente es el gran orgullo de la iglesia y hasta la fecha de hoy a las 10 en punto de cada día hay un excelente concierto a la fresca penumbra del recinto religioso. Un rincón digno de ser visitado sobretodo si se disfruta de un alquiler motos menorca. Nada confiere más tranquilidad y desasosiego que visitar a temprana hora de la mañana el yacimiento de Torralba, un espacio que resume un conjunto levantado por una civilización pretérita, pozos, talayots, enterramientos. Una de sus caras verticales aparece tallada como si alguien ya hubiese querido santificar la piedra, tan importante en un a isla como Menorca, donde la piedra es reina de la mayoría de los horizontes que de forma abrupta desciendas hasta el mar.
Visitar alguna de los caseríos con la finalidad de descubrir cómo se fabrica el rico queso denominación de orígen de Menorca, todo nace de unas vacas rojas o menorquinas, autóctona raza de la isla, son vacas desmochadas sin cuernos que pasturan de forma libre por las colinas de Menorca. Después de sus dos paseos diarios por la montaña las vacas vuelven a lo establos y con la música clásica se dejan ordeñar por las ordeñadoras automáticas.
Siguiendo el camino hacia Ciutadella nos encontramos con el pueblo de Mercadal, un pueblo silencioso de calles preciosas y casas de color blanco, uno pude contemplar las perspectivas casi cubistas de sus tejados, ahí podremos encontrar a una de las primeras zapatearías de la isla, un sitio lleno de recuerdos y dónde todavía se construyen las autenticas abarcas menorquinas.
La historia de la Abarca menorquina naces como la necesidad de calzar a los peyeses de la isla, al tener neumáticos viejos pensaron en como aprovechar aquel material para poder andar por la parte norte de la isla, una zona abundante de roca. El neumático además abundaba y era perfecto como suelo del zapato. En la típica menorquina nos podremos hacer unas albarcas a medida, pudiendo tener un zapato ajustado a la perfección de nuestros pies.
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